La nueva aventura del Loco Abreu toma forma

Viéndole en Perú, cualquiera podría pensar que pese a sus 46 años, el Loco Abreu está intentando tachar otro club más y otro país a su larga lista de lugares en los que ha jugado al fútbol. Pero lejos de eso, la carrera del uruguayo sigue liga al fútbol a través de los banquillos. En lo que aún sigue siendo su corta carrera tras la línea de cal, Abreu puso los pies en Perú para tratar de abordar un nuevo proyecto con César Vallejo. Y hasta el momento, aunque la muestra es escasa, las cosas no le están yendo mal en el inicio del curso.

Pese a que la situación del país es compleja debido a la política, y los clubes de la Liga 1 se encuentran en conflicto con la Federación Peruana de Fútbol (FPF) por los derechos de transmisión, el conjunto de Trujillo trata de ir con paso firme en cada partido que le toca disputar. Cada jornada es una incógnita dentro de la Primera División peruana, y aunque la situación actual puede desencadenar en una locura futura para disputar todo, sumar de a tres puede tener una gran relevancia en el futuro.

Con el objetivo de que el equipo consiga alcanzar un nivel competitivo que se mantenga en el tiempo y se refleje en un rendimiento regular, hasta el momento Abreu ha hecho que en los partidos disputados, sus pupilos se hayan antepuesto a lo que ha sucedido sobre el terreno de juego. Consciente de que el fútbol peruano se encuentra en un momento de reestructuración, el ex internacional por Uruguay hasta ahora no ha tenido un gran paso por los banquillos, y este comienzo se torna ilusionante.

Las remontadas como bandera

Hasta la fecha, César Vallejo ha disputado tres enfrentamientos en la Liga 1, y en ningunos de ellos ha caído derrotado. Eso sí, el conjunto del Loco Abreu ha tenido que ir con todo en juego en todos ellos, ya que inició con el marcador en contra. Es por esto que los de Trujillo parecen expertos para anteponerse a lo que haga el rival en un inicio, y aunque aún no hayan tenido una prueba seria, si han solventado bien situaciones adversas.

Frente a Alianza Atlético en el primer cara a cara de la temporada tuvo su prueba más dura. En casa llegó a tener un resultado de 0-2 pero acabó empatando para que hubiera un reparto de puntos. Ante Academia Cantolao, como visitante, también tuvo un marcador inicial que le puso por debajo con un 1-0, consiguiendo obtener un 1-2 al final de los 90′. En la última fecha, contra Unión Comercio, la cosa seguiría igual en casa. 0-1 después de que rodara la pelota sobre el verde para acabar venciendo por 3-1.

Es un aspecto peligroso para ellos, pero también les vuelve peligrosos por la fortaleza mental que están demostrando para no desmoronarse después de recibir gol. Y por ello, la UCV del técnico uruguayo sigue esperando un reto mayor.