Tapia, de los pocos aprobados en la derrota del Celta

La jerarquía del Real Madrid fue demasiado para un Celta de Vigo que terminó con la canasta llena en Balaídos a pesar de que no hizo un mal partido. Los de Coudet propusieron un partido intenso en la presión inicial, pero cedieron demasiados espacios a los atacantes merengues, que, dirigidos por un brillante Modric, se dieron un festín. Renato Tapia jugó casi todo el partido y, aunque apareció en la foto de los dos primeros tantos, no tuvo una mala noche.

El peruano recuperó su sitio en el once inicial luego de haber arrancado como suplente ante el Espanyol, en la primera jornada de LaLiga. En ese partido, entró en el descanso, pero esta vez Coudet decidió colocarlo desde el inicio para darle cierto orden a su mediocampo, algo que solo se dio durante algunos tramos del encuentro.

Mala fortuna en el penal

Anclado entre los centrales para empezar las salidas con balón y más libre para la presión al intentar recuperarlo, Tapia cumplió en ambas facetas de juego, aunque fue víctima de la mala suerte al impactar un balón en su brazo dentro del área, y también de la genialidad de Modric, que lo dejó tirado en el piso antes de marcar, de forma brillante, el 2-1 desde fuera del área.

Recuperado de ambos golpes, el peruano no perdió la compostura ni en ataque ni en defensa. Sus números (dos duelos ganados de tres, 94% de acierto en pases) son interesantes. De hecho, un pase suyo generó un contraataque comprometedor que Iago Aspas terminó mal, y un cierre milagroso ante una de las varias llegadas de Vinícius Jr. por izquierda impidió otro tanto del Madrid. A pesar de la dura derrota, Tapia hizo un partido correcto y espera recuperar su puesto de titular para los próximos partidos del Celta.