Cristal, maniatado por Boys

A Sporting Cristal le costó y demasiado el partido de turno contra Sport Boys, que asumió su rol de inferior, se agazapó, neutralizó y golpeó en el momento impensado para adelantarse en el Rímac. El resultado era tan impresionante que había que echar vista atrás para rememorar el último triunfo chalaco en ese mismo escenario: 2006 con ‘Chalaca’ Gonzales sentado en el banquillo. A la ‘Misilera’, lamentablemente, se le acabaron los activos, cedió y terminó empatando, aunque el resultado -de todas formas- es una bocanada de aire para un cuerpo técnico que camina por la cuerda floja.

El Sporting Cristal, tal y como nos tiene acostumbrados, se lanzó al ataque ni bien escuchó el silbatazo inicial. Amenazó en los primeros diez minutos con organizaciones por las bandas, sobre todo en la izquierda donde se recostaron constantemente Yotún y Grimaldo. El primero atacó con varios centros y el segundo desquició con sus clásicos recortes. Y todo eso sin que el Sport Boys cruzara al campo local.

Al equipo de Guillermo Sanguinetti, a quien se le vio muy rústico e inferior, le costó imponer su fútbol, pero pasado el sacudón cervecero comenzó a neutralizar los embates a partir de la fricción, el juego duro y la solidez de los centrocampistas Jesús Barco y Daniel Sánchez, pareja imponente que cortó los circuitos de un intenso rival que fue perdiendo ideas y vértigo sobre la hierba del estadio Alberto Gallardo.

Aun así, Cristal se las ingenió para acechar la portería de Álvaro Villete a partir de los centros laterales de Jhilmar Lora, aunque en la etapa de definición los rematadores quedaron al deben. A Ávila y Grimaldo les faltó mucha fortuna. Algo que sí tuvo, curiosamente, el Sport Boys en su primer y único ataque: a la media hora de juego, el argentino Oliver Benítez abrió el score con un testarazo que nació de una pelota parada ejecutada por Barco.

La segunda parte empezó con Cristal como protagonista, tal y como se visualizó en el primer acto, con una ocasión de Irven Ávila que apenas llevó peligro. En vista de que los rimenses carecían de energía, Tiago Nunes metió al campo a Adrián Ascues y Washington Corozo por Jesús Pretell y Joao Grimaldo, respectivamente. A partir de esas variantes recuperó fuerza y músculo y mostró otro rostro, uno mucho más resplandeciente que hacía creer que era posible la igualdad. Y así se dio, al 66′, con un gol de penal anotado por Brenner Marlos, quien entró al duelo en el complemento por Leandro Sosa.

Luego de esa anotación, se dio inicio a otro partido, en cuyo ritmo había un claro dominador: Cristal. En el otro lado apareció un Boys trémulo que se llenó de amonestaciones y de una lesión. Pese a ello, resistió todo lo que pudo y con un hombre menos por la expulsión del recién ingresado Jhilmar Lobatón. Con orden, serenidad y frialdad, los rosados aguantaron hasta el 90′+8 y sacaron una igualdad que bien valió como un triunfo.