NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

SPORTING CRISTAL

Silencio en La Florida

Luego del anuncio de la llegada del nuevo director técnico, Cristal no ha comunicado un solo fichaje: solo renovaciones y salidas. Tensa calma en el Rímac.

Silencio en La Florida

Luego de la frustrante temporada 2022, en la que Sporting Cristal no logró meterse en la final por tercera vez consecutiva, y en la que tampoco consiguió clasificar de forma directa a la fase de grupos de la Copa Libertadores, es natural que la hinchada celeste esté esperando con cierto nerviosismo algunas novedades en el mercado.

Sin embargo, hasta el momento, la gran mayoría de anuncios en las redes sociales de Cristal tienen que ver con salidas y renovaciones, algunas de las cuales, por cierto, han causado más malestar que satisfacción. Si bien la llegada de Tiago Nunes como reemplazo de Roberto Mosquera ha generado ilusión, hay muchas más dudas que certezas sobre la conformación del plantel para la próxima temporada.

Bajas y renovaciones

Estos últimos días han sido agridulces para la afición rimense. La salida de Horacio Calcaterra, capitán y uno de los símbolos del equipo, generó una suerte de crisis. Que se haya ido a Universitario, uno de los rivales históricos, la profundizó. Para la afición, la década que pasó el argentino defendiendo los colores de Cristal se verá sin dudas manchada por el cambio de camiseta, sobre todo porque, según pudo saber este medio, ha sido una cuestión relacionada básicamente a lo económico, por más que el futbolista lo ha negado.

También partió Omar Merlo, otro de los líderes del equipo, aunque su salida ha sido bastante mejor recibida dada su edad (35) y su flojo último año. Además de los dos argentinos, dejaron La Florida Joffre Escobar, Aryan Romaní, Christopher Olivares, Jhon Marchán y José Inga.

El capítulo de las renovaciones ha traído menos sorpresas. Se quedarán en el equipo futbolistas importantes como Alejandro Duarte, Alejandro Hohberg, Irven Ávila y Nilson Loyola, casi todos titulares en los últimos dos años, además de Renato Solís, el portero suplente, que se perdió buena parte de esta temporada por una seria lesión.

Situaciones por definir

Dos jugadores que tendrían que ser titulares indiscutibles todavía no definen su presente ni su futuro. El primero es Martín Távara, separado del primer equipo luego de que fuera denunciado por violencia doméstica en la televisión por su expareja. Según pudo saber AS Perú, el futbolista está recibiendo asesoría de parte del club, que está esperando que la situación legal se resuelva para tomar una decisión definitiva. No está descartado que vuelva a colocarse la camiseta celeste el próximo año.

El otro caso es muy distinto. Se trata de Yoshimar Yotún, quien llegó para reforzar al equipo en marzo pero las lesiones lo mantuvieron al margen durante casi toda la temporada. El volante de la selección tenía la idea de continuar su carrera en el extranjero, pero su compromiso con la institución, sus ganas de sacarse la espina de no haber tenido un buen año y la falta de ofertas verdaderamente atractivas lo harían renovar por todo el 2023.

Con respecto a los refuerzos, todavía está todo en el terreno de la especulación. Según pudo averiguar este medio, la partida de Juan José Luque -exdirector deportivo- le dará independencia y autonomía en lo deportivo al técnico Tiago Nunes, quien todavía no llega a Lima. El brasileño tiene la idea de traer por lo menos un central y un delantero de peso, ambos extranjeros, a la espera de que se solucione la situación de Washington Corozo, quien tiene un año más de contrato con el club pero busca jugar en una liga más competitiva.

Todo se debería empezar a esclarecer a partir de la próxima semana, cuando lleguen Nunes y su cuerpo técnico. La idea de Cristal es empezar la pretemporada el 8 o el 15 de diciembre, e idealmente debería hacerlo con el plantel mejor conformado y el futuro más claro. De momento, el silencio en La Florida empieza a generar un poco de ansiedad en una hinchada que no ha tenido un buen año y que, por lo menos, espera una campaña de fichajes que invite a la ilusión.