El viaje exprés de Asensio: de promesa a estrella mundial
En poco más de un año, el balear ha asumido galones en el Madrid y se ha revalorizado en el mercado un 225%. El Madrid le ha puesto una cláusula de 700 millones.
Marco Asensio ha pegado el estirón en el Real Madrid. Ha pasado de meritorio a crack en poco más de una temporada de blanco. El club blanco se movió con inteligencia en diciembre de 2014 cuando, con sólo 18 años, le fichó por 3,9 millones. Su talento había llamado la atención de grandes como el Barça o el Bayern (el director técnico del Bayern de Múnich, Michael Reschke, aseguró en una entrevista en El País que "hay que hacerle un monumento al que fichó a Asensio por 3,9 millones"). Pero Asensio no dudó cuando recibió la llamada del Madrid. Permaneció cedido en el Mallorca, el Madrid le mandó un año cedido al Espanyol para curtirle en los rigores de la Primera División y en verano de 2016 se incorporó a la pretemporada con Zidane. Jugador de técnica, atrevido y exquisito con la pelota, encandiló al técnico francés que apostó por él.
Zizou hizo fuerza para que el Madrid no escuchara ninguna oferta de cesión por Asensio ya que consideraba que ya estaba preparado para ser importante con la camiseta. “Si se queda sabe lo que tendrá”, declaró Zidane antes de cerrarse el mercado. El técnico le alineó en el primer partido oficial de la temporada, la Supercopa de Europa ante el Sevilla en Trondheim (por las bajas de Kroos, Bale y Cristiano), y el balear dejó su primera carta de presentación: abrió el marcador con un chutazo de 30 metros que dejó a Sergio Rico sin capacidad de respuesta. También debutó en Liga en Anoeta, en la primera jornada de Liga, con un gol de vaselina a Rulli que causó asombro. En dos partidos demostró que, pese a su juventud, la camiseta del Madrid no le pesaba, le quedaba como un guante.
Pero cuando el entrenador marsellés tuvo a todos aptos, el joven mediapunta pasó a formar parte de ese plan B que maravilló a todos. Salvo un periodo entre febrero y marzo, donde llegó a estar seis partidos seguidos sin jugar un minuto y pasó por malos momentos, Marco no encadenó más de tres partidos sin participar. El jugador se adaptó de maravilla a su rol en un equipo de la exigencia del Madrid (marcó en su debut en la Supercopa de Europa, en la Liga, en la Champions y en la Copa) y acabó con 10 goles en 1.918 minutos. En el tramo final fue clave para Zidane, con actuaciones que dejaron huella: Bayern, Barça, Atlético… Partidos que le han valido para derribar la puerta del Madrid y de la Selección española, maravillando a Europa.
Esa dimensión que alcanzó la pasada temporada a golpe de exhibición le ha hecho ganar galones y peso en la presente campaña (Zidane optó por vender a James y apostar definitivamente por la clase del balear). Y Asensio ha vuelto a responder: es el segundo máximo goleador del equipo (cuatro tantos) por detrás de Cristiano (cinco), brillando ante el Barça en la Supercopa, rescatando un punto con un doblete ante el Valencia y asumiendo responsabilidades impropias de su edad (21). Esta hoja de servicios le ha valido para que el prestigioso diario L’Equipe le eligiera como mejor Sub-21 de Europa y para revalorizarse en un año un 225%, según la web especializada Transfermarkt.
Asensio llegó al Real Madrid como un futbolista prometedor y poco más de un año después es considerado una de las estrellas del fútbol europeo. Por eso, el club blanco le ha renovado hasta 2023 y le ha querido blindar con una cláusula de 700 millones de euros. El balear es oro.