Se acerca la hora: Auckland - Wellington, el paso previo

La selección peruana completó sus labores de preparación para el duelo de ida ante Nueva Zelanda por la repesca rumbo a Rusia 2018 y en unos minutos, sobre el mediodía del viernes 10 en Auckland, abordará el charter que los llevara en menos de una hora a la capital Wellington, sede del partido.

Luego de instalarse y de dar su conferencia de prensa Ricardo Gareca, seleccionador de Perú, el equipo entrenará a la misma hora del partido y reconocerá un terreno que parece estar en perfecto estado.

Las prácticas se concentraron mucho en el juego aéreo defensivo, aspecto en el que también se sentirá la ausencia de Paolo Guerrero, clave en la marca zonal sobre el vértice del área chica en jugadas de tiro de esquina en contra. Y en funciones de ataque ha ensayado Gareca con el bloque que suele alinear desde le centro del campo: la pareja Tapia-Yotún en primera línea, el tridente Carrillo, Cueva, Flores en segunda y Jefferson Farfán - elegido por estos días figura de excepción durante Octubre en la liga premier rusa - como sustituto de Paolo Guerrero en el centro del ataque. Quizás la única sorpresa de los días previos está en la muy probable inclusión de Advíncula, su velocidad y largos recorridos, en reemplazo del fervor e intensidad de Corzo por el lateral derecho. Un mensaje expreso de las intenciones de Gareca de salir a atacar por los flancos y aglutinar a los hábiles para generar desequilibrios por el medio.

Tiene claro el equipo blanquirrojo que la fórmula para superar a Nueva Zelanda es el juego a ras del piso. La recuperación rápida, la administración de la pelota por abajo, el desmarque constante, la habilidad e improvisación puestos al servicio del equipo para sorprender a una defensa dura, que sufre en el duelo uno contra uno y que, además, mostró torpeza cometiendo tres penales en los dos partidos ante Islas Salomón durante la llave que les dio a los All Whites su acceso a esta instancia.

Como hemos señalado anteriormente, es favorito Perú de acuerdo al análisis de la prensa mundial y también en la mente de los apostadores que se inclina por el cuadro visitante en esta ida. De lo que se trata ahora, es de enfocarse en trasladar esa superioridad al juego, con la misma convicción, seriedad y determinación mostradas en la recta final de la liga sudamericana premunidalista. Sostener la solidez defensiva lograda, cuidar la tenencia del balón, atreverse con soltura a encarar y desequilibrar y llevar la competitividad sudamericana al trámite y a las cifras del partido. No es fácil. "Hay que jugarlo" se dice siempre. Y es así. Peru tiene que echarse a jugar. Si lo hace con un nivel que supere los 6 o 7 puntos, podrá traerse un resultado positivo de Oceanía.

La ansiedad crece. Allá en las calles, cafés, estaciones de servicio y transporte público hay un solo tema. Clasificar al mundial. Que el plantel de Gareca redondee su maduración y logre su retorno al gran escenario mundial.