AMISTOSO | HOLANDA 2 - PERÚ 1
Los errores condenan a Perú
La Blanquirroja fue un ciclón en el inicio, pero fue de más a menos y acabó siendo dominada. Los goles llegaron tras fallos defensivos. Aquino hizo el tanto peruano.
Hay partidos que sirven para aprender, y Perú debe hacerlo de la derrota sufrida en Ámsterdam ante Holanda. La Blanquirroja fue de más a menos y acabó siendo dominada a pesar de demostrar en ciertos momentos de partido que podía ser mejor que su rival. La 'Oranje', con mucha posesión pero poca profundidad, aprovechó los errores de Perú para remontar el tanto inicial de Aquino. Memphis Depay fue goleador por partida doble. Lo más destacado, la despedida de Sneijder del equipo nacional.
Cuando juega bien, Perú es un ciclón. Sus primeros veinte minutos fueron un placer para el espectador. Perfecta presión tras pérdida, repliegue intensivo correcto y ataques a una velocidad de vértigo. Y el fútbol te premia cuando juegas bien: Aquino, un hombre de 1,75, se elevó entre los altos centrales a la salida de un córner para hacer de cabeza el primero del partido. Aunque parece una contradicción, el gol fue un problema para Perú, que dejó de jugar y se marchó al descanso con el resultado a favor pero con la sensación de haber mostrado muy poco de su potencial. Y es que Holanda, sin hacer grandes esfuerzos, encerró a la Blanquirroja.
La segunda mitad parecía que comenzaba igual que la primera. Sin embargo, en esta ocasión la efervescencia peruana duró solo unos minutos. Holanda creció con la entrada de Frenkie De Jong, un joven rubio del Ajax con aspecto de veranear en Mallorca pero con una claridad a la hora de jugar al fútbol que fue clave para engrasar el juego algo errático de los locales. Por algo ha sonado todo el verano para fichar por el FC Barcelona. Le costó, pero Holanda consiguió al fin convertir ese dominio en goles. La estrella fue Depay, el jugador neerlandés más en forma y el que mejor aprovechó los errores defensivos de Perú. En el 60’ tras un córner y en el 83’ a la contra para cerrar la remontada.
Más allá de los goles, lo más destacable de la noche fue la despedida de un mito. El Johan Cruyff Arena fue un clamor cuando el cartel luminoso del cuarto árbitro mostró el número 23. Dejaba la cancha Wesley Sneijder, y lo hacía por última vez con la llamativa camiseta naranja tras 15 años, 134 partidos y 31 goles, además de un subcampeonato del mundo y un tercer puesto.