ALIANZA LIMA
Alianza con Russo, promete
Es claro que el juego que le dé a Alianza Lima dependerá de cómo termine de completar la plantilla con los futbolistas que él sugiera importar.
Confirmado el fichaje del técnico argentino de inocultable identidad "pincharrata", ex integrante de un gran equipo de Estudiantes de la Plata, que tenía en sus filas, entre otros, a Ponce, Trobbiani, Sabella, Gurrieri y Trama y, como técnico, al "narigón" Bilardo, es bueno dar una mirada a la propuesta de juego que lleva en su ADN y también a cómo fue visto su pasado reciente en Millonarios de Bogotá.
Russo ha trascendido más como técnico, que como el prolijo medio central de recuperación que fue como jugador. Empezó como dt en Lanús, de la segunda de su país, con el que logró ascender tanto en el '90 como en el '92. En el '94-'95 dirigió a Estudiantes de La Plata junto a Eduardo Luján Manera -paradójicamente ex-conductor de Universitario - con quienes también logró el retorno a primera.
Dirigió en diversos periodos a Rosario Central; en México condujo al Monarcas Morelia; en Chile, a Universidad de Chile, equipo con el que llegó a la semifinal de la Copa Libertadores en el '96 y en España tuvo bajo su responsabilidad a la Unión Deportiva Salamanca. En el 2007 llegó a su cúspide con la Libertadores que ganó como líder de Boca Juniors y luego tuvo pasos intrascendentes por San Lorenzo, Racing de Avellaneda y los mencionados Estudiantes de la Plata y Rosario Central antes de su éxito en Colombia.
A pesar de ser un técnico obsesivo por las funciones defensivas, muy trabajador de la pelota parada y más bien conservador en sus planteos, en Millonarios de Bogotá salió campeón por mostrar un rostro más agresivo, más dinámico y atrevido de lo habitual. Si bien al final de su experiencia con el cuadro azul, se le reprochó tener pocas variantes de juego, en general, solía presentar 3 delanteros tanto de local como de visitante y con ello pegó un salto de calidad innegable.
Es claro que el juego que le dé a Alianza, será el de buscar primero equilibrio y orden colectivo y luego, darle variantes de ataque y contundencia dependerá de cómo termine de completar la plantilla con los futbolistas que él sugiera importar.
Por ahora, los íntimos, no han fichado mal. Necesitaban laterales a gritos y ya tiene a Rodrigo Cuba y a Aldair Salazar. Necesitaba volantes de buen manejo, desequilibrantes y creativos e incorporó a Manzaneda y a Joaozinho Arroé. Requería de mayor vigor en el eje para la recuperación de la pelota y repatrió a Wilder Cartagena. Resta conocer a los jugadores que vendrán de fuera. Aunque no se sepa aún nombres oficialmente, el capítulo blanquiazul que se abre con Miguel Angel Russo, promete. Su primer reto sin embargo, la Copa Libertadores, se le presenta con un grupo de terror; pero un "pincharrata" nunca se amilana. A esperar el 2019 para la pretemporada y ver a esta nueva versión de Alianza Lima que, insisto, promete.
