Cinco elementos para celebrar de los Juegos Panamericanos

No tuvieron un oro, pero algunos elementos que se dieron en los Juegos Panamericanos de Lima 2019 conspiraron para el éxito deportivo, social y político del evento y se convirtieron en
elementos de celebración para todo el deporte olímpico americano.

Esta lista recoge cinco temas que tuvieron una presencia destacada en Lima 2019 por su novedad o su proyección o como buenas lecciones entregadas a los aficionados.

LOS NUEVOS DEPORTES

El ingreso de nuevos deportes al programa panamericano, algunos de ellos que también serán parte del programa olímpico en los Juegos de Tokio 2020, ha sido un rotundo éxito.

El baloncesto 3x3, el surf y el fisicoculturismo debutaron de forma absoluta en una competencia de este nivel, mientras que otras disciplinas y modalidades agregaron opciones de medalla novedosas y también de gran éxito.

Aquí hablamos del taekowndo poomsae, el regreso tras casi treinta años de ausencia de las katas en kárate y las carreras de relevos mixtas en natación y triatlón.

Particularmente el baloncesto 3x3 y el surf cautivaron el imaginario colectivo de Lima 2019. El primero, que atrajo mucho público, demostró frescura, dinamismo y versatilidad, además de matices y sutilezas cautivadoras y promete mucho éxito en Tokio.

El surf ofreció imágenes espectaculares y carreras bellas y dramáticas como las del "paddle board", además de medallas para países poco presentes hasta la fecha en el medallero, al igual que el fisicoculturismo.

EL DEPORTE PERUANO

Nunca, en toda su historia, el deporte peruano había logrado tantas medallas en unos juegos ni había ocupado un lugar tan alto en el medallero de una competición continental.

Los tres oros logrados en Toronto 2015, su mejor resultado hasta la fecha, o los catorce metales obtenidos en Buenos Aires 1951, palidecen ante la cosecha de 11 oros, 7 platas y 21 bronces de Lima 2019.

Tampoco había logrado Perú preseas tan significativas como las alcanzadas en Lima 2019, ni tan diversas.

Tiro, vela, kárate, atletismo, pelota vasca, squash, esquí acuático, judo, taekowndo...fueron todas disciplinas que premiaron a Perú.

Y el surf, donde el país demostró ser la potencia continental y se llevó tres oros y tres platas.

El éxito indudable del deporte peruano comenzó a verse pronto, con dos oros gloriosos para el país en maratón, donde Gladys Tejeda y Christian Pacheco se llevaron las preseas doradas en la carrera más mítica del atletismo olímpico.

Eso arrastró también a mucho público a los estadios y, ojalá, y eso es lo que se espera, a más peruanos a probar nuevos deportes.

LAS INSTALACIONES DEPORTIVAS

No ha habido nadie que no haya alabado las instalaciones deportivas en las que se han desarrollado los Juegos Panamericanos.

Cómodas, de una calidad internacional inmejorable, prácticas y bonitas.

También se ha hecho evidente que tienen mucho futuro y que no se convertirán en los "elefantes blancos" tan temidos por las autoridades.

El Centro Acuático de la Videna, sede de las pruebas de natación y clavados, resultó un lugar espectacular para los deportes acuáticos que también se podrá abrir al público general cuando culminen los Juegos.

Lo mismo puede decirse del estadio de atletismo, con unas pistas e instalaciones impresionantes, que permitirán instalar allí un pequeño centro de alto rendimiento para los deportistas peruanos.

Los campos de rugby, hockey, béisbol y sóftbol de Villa María del Triunfo serán también un legado importante para una ciudad de doce millones de habitantes que no disponía de ningún espacio dedicado a esos deportes.

También serán un polo de atracción en un barrio marginal, que permite soñar con que los niños y las niñas de la zona tengan nuevas experiencias en un entorno deportivo de extraordinaria calidad y el deporte sirva como impulsor de la inclusión social.

UN ATLETISMO DIVERSO, UN MEDALLERO COMPLETO

El medallero del atletismo en los Panamericanos de Lima 2019 dibujó un panorama multipolar, sin ningún poder hegemónico demasiado poderoso y sin tampoco nadie que se hubiera podido descartar por su debilidad.

Sí, EE.UU. ocupó nuevamente el primer lugar en las pruebas de atletismo, con siete oros, catorce platas y doce bronces, una marca extraordinaria pero que contrasta con los trece oros logrados en Toronto 2015 o los dieciocho oros que logró Cuba en Guadalajara 2011.

En Lima, Brasil (6), Jamaica (6), Canadá (5), Cuba (5), México (3) y Colombia (3) contaron con mucho protagonismo y pelearon hasta la última prueba para el ránking, que contó con hasta 14 países cuyo himno sonó en el Estadio de la Videna.

Países como Perú entraron con fuerza en el medallero, con dos oros en pruebas emblemáticas como el maratón; Colombia sorprendió con un mayúsculo equipo de relevos en 4x400; México dominó el fondo y medio fondo con tres oros en 1.500 y los 5.000 masculino y femenino.

Ecuador tuvo oros en pruebas de velocidad y de fondo, Jamaica en velocidad, evidentemente. Pero también en disco y en peso. Cuba dominó en los saltos, largo y de altura, y los EE.UU, más eclécticos, obtuvieron un poco de todo pero mucho de ninguna prueba.

En este orden de cosas, el medallero de Lima 2019 tuvo también una alegría general. Un regatista de Aruba, Mack Van Den Eerenbeemt, logró una medalla de bronce en la clase RS:X. Con ese metal, todas las federaciones olímpicas (41) que forman parte de Panam Sports han logrado al menos una medalla en los Juegos Panamericanos.

LA PISCINA DE LAS BARRAS Y ESTRELLAS

La hegemonía histórica de una potencia en un elemento, en esta caso el agua, sí volvió a hacerse evidente en Lima.

Estados Unidos se llevó el 58,3 % de las medallas de oro que se repartieron en el Centro Acuático de la Videna, un total de 21 preseas que ratificaron su poder sin comparación en el agua pese a la oposición de los equiposde Brasil y Argentina.

El dominio estadounidense fue colectivo y ninguno de sus nadadores se llevó más de dos oros en categorías individuales.

La falta de un líder dominante en los EE.UU. hizo que fuera imposible opacar el brillo individual de la argentina Delfina Pignatiello, que
con 19 años se alzó con 3 oros.

Tampoco pudo ocultar la confirmación de Brasil como una creciente potencia en el agua, con especial predilección por las pruebas cortas de velocidad y los relevos.