PERÚ 1 - 0 VENEZUELA
Perú se mete en la pelea
La selección sufrió demasiado para superar a una Venezuela que se quedó con diez hombres en el 25’. Con el triunfo, se pone a dos puntos del repechaje.
Ha vuelto a quedar claro, como si se necesitara una nueva prueba, que a Perú no le sobra nada. La selección no logró superar a Venezuela en el juego a pesar de que estuvo por dos tercios del partido con un jugador más, pero sí lo hizo en el marcador. Un solitario gol de Christian Cueva bastó para que los de Ricardo Gareca sumen su primer triunfo de locales, lo que los mete a la pelea por el repechaje: solo están a dos puntos de Colombia, que ocupa el quinto puesto.
Perú descubrió desde el pitazo inicial -porque por momentos pareció que no se lo esperaba- que Venezuela metería el partido a su ritmo en base a rigor físico. La vinotinto compensó su limitado talento individual con presión alta y disputando cada balón dividido a mil por hora: esa es la forma de entender el fútbol de esta competitiva generación de futbolistas venezolanos.
La selección intentó poner paños fríos a la vehemencia de la visita con triangulaciones y toques cortos, una fórmula que le ha solido funcionar, pero echó de menos a un pilar de esa filosofía: Yoshimar Yotún. El zurdo, como contra Uruguay, volvió a estar sorprendentemente errático con el balón: falló demasiados pases y no encontró a sus compañeros. En ese sentido, también repitió su mala actuación ante los charrúas Edison Flores, incapaz de asociarse con el resto del equipo.
Cuando el juego peruano empezaba a cuajar, Christian Cueva aprovechó un error en salida de Mikel Villanueva y se encontró completamente solo en el borde del área. Como suele pasar cuando la tienen los jugadores diferentes, pareció que el tiempo se detenía mientras el número 10 se acomodaba para definir suavemente al palo izquierdo de Wilker Faríñez, que se jugó para el otro lado. Perú se ponía 1-0.
Minutos después, luego de una acción bastante irresponsable de Tomás Rincón, que le aplicó un codazo en el rostro al autor del gol, el mediocampista venezolano recibió su segunda amarilla y se fue expulsado. Con un tanto a favor y un hombre más en el campo, parecía que la suerte estaba echada, el camino al triunfo, pavimentado, y los tres puntos, casi en la canasta. Nada más lejos de la realidad.
Si no se sufre…
Perú no supo aprovechar su superioridad numérica frente a un rival físicamente más entero. A pesar de que tenía un jugador menos, fue Venezuela la que se adueñó de la pelota y la que se acercó más al arco rival. Pedro Gallese tuvo que realizar una gran parada después de un remate de Martínez mientras reclamaba a sus defensores un poco más de seguridad y presión.
La selección, atarantada y víctima de lo que pareció ser un prolongado ataque de pánico escénico, no pudo jugar con la calma que proponía el contexto. Ricardo Gareca intentó devolver control con sus cambios, pero tampoco funcionaron: ni García, ni Gonzáles, ni Ruidíaz, ni Guerrero pudieron darle oxígeno al equipo, que sufrió hasta el último segundo para asegurar los tres puntos.
Finalmente, Perú consiguió su primera victoria en casa después de un inicio de pesadilla de eliminatorias y, como sin querer, se mete de lleno en la pelea por clasificar a Qatar 2022. Parte de esa hazaña pasa por lograr un improbable resultado en Brasil, el jueves, pero por el momento hay tiempo -muy poco, pero tiempo al fin- para celebrar. El sueño está vivo.