Universitario se pone firme: quiere árbitros extranjeros

La derrota de Universitario de Deportes, el domingo, ante Alianza Atlético en Sullana, hundió prácticamente todas sus posibilidades de hacerse del Apertura. Pero, más allá de eso, lo que ha frustrado a la directiva e hinchada de los cremas fue la forma en que se perdió, por culpa de lo que consideran fue un arbitraje negligente de Augusto Menéndez, quien expulsó a tres jugadores merengues y a dos del cuadro local.

Enfurecido luego de la derrota, Jean Ferrari, administrador de la ‘U’, twitteó que, de ahora en adelante, el club solicitaría ternas extranjeras para los partidos que le quedan. “A partir de ahora, solicitaremos solo terna extranjera, esperemos acepten por los plazos. Ya es increíble ver cómo expulsan a un futbolista nuestro por aplaudir un mal cobro o reclamar por un golpe por detrás a uno de los nuestros. Nos cansamos de cartas y comunicados”, escribió el dirigente

Ferrari se refería a la expulsión de Nelson Cabanillas, quien vio la roja luego de aplaudir irónicamente un cobro del juez de línea. Menéndez, algo fuera de control, se acercó rápidamente al lateral izquierdo de Universitario para echarlo, nueve minutos después de haber expulsado a Aldair Perleche por una fuerte falta sobre Rodrigo Ureña.

Perleche y Cabanillas fueron dos de los cinco expulsados por el árbitro: les siguieron Aldo Corzo, por una agresión; Rodrigo Ureña, por una entrada descalificadora; y Ángelo Pizzorno, quien recibió una segunda amarilla por una falta que parecía intrascendente. A Menéndez se le fue sin duda el partido de las manos, pero los dos equipos fueron víctimas de su pésimo arbitraje.

Un precedente peligroso

La reacción pública de Ferrari no solo fue en caliente. Según pudo saber AS Perú, la directiva de Universitario tiene la firme intención de que la FPF autorice ternas arbitrales extranjeras para el resto de partidos de la Liga 1, así como que la Comisión Nacional de Árbitros (Conar) suspenda a Menéndez.

Lo cierto es que la Conar cerrará filas y hará todo lo posible para no permitir que réferis extranjeros trabajen en el torneo peruano. La Federación Peruana de Fútbol (FPF) tampoco ve con buenos ojos esta opción, y mucho menos los demás clubes, que se sentirán perjudicados y en desventaja con respecto a Universitario. Tampoco sentaría un buen precedente.

Por el lado de los cremas, estos deberían costear por completo el pago a los árbitros que vengan de fuera. Los equipos arbitrales reciben alrededor de 10 mil dólares por partido en competencias de la Conmebol. Los equipos que no cuenten con este presupuesto extra -la mayoría, por cierto- pondrán el grito en el cielo de darse estas excepciones. Si bien el arbitraje peruano está en crisis, y eso es innegable, contratar ternas extranjeras no parece ser la solución ideal.