Cristal naufraga en el debut

La Copa Libertadores es ese muro de concreto frente al que se chocan los equipos peruanos un año tras otro. Es la soga que los mantiene atados a la realidad; el aviso, siempre repetido, de que el Perú, a nivel de fútbol de clubes, está en el sótano de Sudamérica. Esta noche no fue diferente y Sporting Cristal recordó que ser el rey en casa no garantiza nada fuera de ella.

En frente tuvo, además de ese muro llamado realidad, a un equipo bastante más competitivo, aunque nada vistoso. Sao Paulo, con su gran presupuesto, sus jugadores de renombre y su técnico de moda, solo fue más eficaz: ni más alegre, ni más entretenido, ni demasiado mejor. Suficiente para llevarse los tres puntos a casa sin siquiera sufrir en el camino.

Roberto Mosquera, el mejor técnico de la Liga 1, optó por repetir lo que su equipo realiza en el torneo local: presión muy alta, salida a ras de suelo y toques rápidos en ataque. Todo lo cual suena muy bien en el papel, y es bastante más fácil de ejecutar frente a los rivales peruanos, pero no funcionó esta vez. Cada vez que Sao Paulo consiguió saltar la presión alta de Cristal, generó peligro a una defensa que lució muy débil sobre todo en sus flancos.

A los 17’, cuando los celestes no terminaban todavía de ilusionarse, Luan aprovechó un pésimo rechazo en defensa de Washington Corozo y marcó el primero con un remate de media distancia que se desvió en la defensa. Cristal intentó reaccionar pero el flojo partido de Christofer Gonzáles, la poca creatividad de un muy errático Horacio Calcaterra y la apatía de Corozo lo impidieron.

Mosquera optó por presentar el mismo once en la segunda parte, lo cual funcionó a medias hasta los 60 minutos, momento en el que Johan Madrid -suplente en el torneo local, incomprensiblemente titular en la Libertadores- regaló una pelota en salida que fue aprovechada por Martín Benítez para anotar el segundo. Cristal empezó a morir con el 0-2 y terminó de hacerlo con el gol de Éder en el 91'.

Si bien el árbitro pudo cobrar dos manos en el área brasileña -la ausencia del VAR jugó en contra de los rimenses-, no se le puede echar la culpa de la dura derrota en el debut. Sao Paulo fue pragmático y contundente; Cristal fue naif y poco creativo. En la Copa, eso es suficiente para perder en casa. Los de Mosquera deberán mejorar mucho si quieren saltar el muro, desatar la soga, romper con la historia. Todavía hay tiempo