El grave problema de los internacionales en sus clubes

Tras las derrotas de Perú ante Ecuador y Costa Rica en Lima y Arequipa han saltado las alarmas entre los aficionados y, por supuesto, en el cuerpo técnico que dirige Ricardo Gareca. El seleccionador aseguró que los partidos han servido para sacar conclusiones y que analizará en detalle lo ocurrido. Uno de los problemas del equipo fue la intensidad con la que encaró los juegos y la falta de minutos de pilares de la Bicolor en sus clubes, puede ser el motivo.

Habitualmente los internacionales son piezas importantes en sus clubes y tras despuntar en los campeonatos nacionales reciben la llamada del seleccionador. Sin embargo, en Perú esto no es lo habitual en jugadores de extrema importancia, habituales titulares para Gareca apenas juegan y sólo se sienten importantes cuando visten la camiseta de Perú.

Miguel Trauco, lateral izquierdo indiscutible, es el caso más extremo. Desde hace más de un año apenas juega con Flamengo. El Brasileirao ya llega a su fin y sólo ha participado en seis encuentros. Sin embargo, Gareca no encuentra un sustituto de garantías para él.

Christian Cueva, tras sus problemas extradeportivos en Sao Paulo tomó rumbo al Krasnodar ruso. Sin embargo, sólo ha sido dos veces titular en liga y en Europa League ha repartido sus cuatro partidos entre la suplencia y la titularidad. Aún no ha sido capaz de marcar e incluso no ha sido convocado en esta última fecha a pesar de ser uno de los jugadores más desequilibrantes de Perú.

Édison Flores ha crecido en los últimos años y con la selección ha rendido en cuando a juego y también números. Sin embargo, ahora en Morelia, en la Liga MX, apenas ha jugado. En 16 jornadas sólo ha aparecido en un partido de inicio y en cinco como suplente. Un freno a su progresión, que puede resultar desastroso a sus 24 años.

Anderson Santamaría se ha erigido como principal candidato a suceder a Alberto Rodríguez. Sin embargo, vive un caso similar al del Orejas. En Puebla sólo ha jugado seis partidos del torneo Apertura de la Liga MX y el año pasado si situación fue la misma. Es difícil de imaginar que un jugador suplente en un equipo de perfil bajo en México pueda rendir a gran nivel como central titular de una selección mundialista.