CASO GUERRERO
La WADA no deja a Guerrero jugar dos partidos amistosos
El delantero peruano estaba invitado a la despedida de Emerson Sheik y al "Lance de Craque", pero su sanción no le permitirá estar en ninguno de los dos.
Aunque cada vez queda menos para el fin de la sanción por dopaje de Paolo Guerrero, el delantero está viviendo momentos complicados. Desea con fuerza volver a los terrenos de juego, pero la Agencia Mundial Antidopaje no le deja ni jugar los amistosos a los que ha sido invitado. Había sido invitado a dos partidos benéficos, pero la WADA le ha avisado que no tiene permitido participar ya que no existe diferencia entre partidos oficiales y amistosos, según ha informado el medio brasileño Gaucha.
El primero era un encuentro de despedida a Emerson Sheik, con el que compartió vestuario durante su etapa en el Corinthians y que se retira con 40 años. El segundo es el Lance de Craque, un partido organizado por el argentino Nicolás D'Alessandro en el que todos los fondos obtenidos serán destinados a mejorar la situación de personas necesitadas.
La vida de Guerrero ha sido una montaña rusa en el último año. Tras suspenderle, retirarle la suspensión y volver a castigarle, el único deseo del jugador es que está triste etapa llegue a su fin y volver a disfrutar del fútbol.