El incierto futuro de Advíncula

Luis Advíncula mira con incertidumbre su futuro. El Rayo Vallecano certificó su descenso de categoría a falta de dos partidos con el lateral derecho peruano de nuevo fuera del equipo en una temporada de más a menos que puede salirle cara pensando en la próxima campaña.

Señalado como un portento físico en el carril derecho, con una velocidad endiablada y cumpliendo en la faceta defensiva, el comienzo de Advíncula con el equipo rayista en el plano individual fue difícilmente mejorable. Los número así lo reconocen: tras salir desde el banquillo en la primera jornada, el peruano jugó todos los encuentros íntegros -ante el Valencia fue sustituido en el 87'- hasta que se quedó sin jugar un minuto frente al Atlético de Madrid, ya a mediados de febrero.

Inquilino indiscutible en el carril diestro de Vallecas con Míchel, no tardaron, de hecho, en salir los primeros rumores que ya le situaban en distintos equipos europeos de mayor entidad. Pero su situación cambió drásticamente al ritmo que su equipo se iba hundiendo en la tabla.

Tras encadenar 7 derrotas seguidas, Paco Jémez se hizo cargo del banquillo tras la correspondiente destitución del técnico anterior y optó por dejar fuera a Advíncula en las dos primeras citas, jugando todo el partido una semana después en el triunfo frente al Valencia, que sería la última vez que el peruano gozara de la confianza del entrenador ya que, una jornada más tarde, ante el Ahthletic en San Mamés en un encuentro decisivo, Advíncula dejó a su equipo con diez tras 'autoexpulsarse', viendo dos amarillas por acciones que pudo haberse ahorrado.

Jémez le sacó del 'once' pese a admitir sus disculpas en el vestuario, dejándole sin minutos frente a Sevilla, Real Madrid y Levante, ante el que se consumó el descenso. 

Ante este panorama y con su continuidad en el Rayo prácticamente descartada, Advíncula deberá regresar a Tigres y ver hasta qué nivel creció su cartel en Europa, pasando de ser un lateral cotizado al olvidado de cada fin de semana en un equipo descendido. Ofertas no le faltarán, el tiempo dirá qué sucede.