SELECCIÓN PERUANA
Advíncula: de olvidado en el Rayo a fundamental con Perú
El carrilero ha disputado todos los minutos de esta Copa América con Gareca, demostrando de nuevo una capacidad física para atacar y defender difícil de igualar.
Perú logró el billete a las semifinales de Copa América ante Uruguay, clasificando por tercer torneo consecutivo y por séptima vez en su historia. En un equipo en el que Gareca lidera con mano de hierro un bloque en el que Paolo Guerrero, Cristian Cueva o Jefferson Farfán suelen acaparar los focos, hay un factor que no varía: el rendimiento de Advíncula con la Bicolor.
El carrilero nacido en la provincia de Chincha ha encontrado en esta Copa América su particular redención tras una temporada con el Rayo en la que comenzó como un ciclón y acabó siendo olvidado por el técnico y con el equipo descendiendo a Segunda División.
Tras meses siendo de lo más destacado del conjunto rayista, llegó el cambio en el banquillo. Paco Jémez no perdonó su 'autoexpulsión' en un encuentro clave por la permanencia en San Mamés, quedándose los cinco siguientes encuentros sin jugar y disputando la última e intrascendente jornada liguera. Y entonces llegó la Copa América y un nuevo aire fresco para un Advíncula con el futuro incierto tras finalizar su cesión con el conjunto rayista.
Lateral inamovible en el carril diestro de la Bicolor, Advíncula ha jugado todos los minutos con Gareca, exhibiendo su envidiable capacidad física, algo que le permite ser un incordio constante para la zaga rival pero también un muro cuando toca defender. En el duelo decisivo ante Uruguay, además, no le tembló el pulso para coger la responsabilidad y convertir su penalti en la tanda decisiva.
La selección peruana ya afronta el reto de ganar a Chile y seguir soñando con su tercera estrella de campeón, tras los campeonatos logrados en 1939 y 1975.