El futuro de Mario Salas en Alianza, en entredicho

El entrenador es el eslabón más débil de la cadena de un club cuando la situación viene mal dada. Una dinámica negativa de resultados afecta a la moral de la plantilla y también merma el margen de maniobra de los técnicos.

Puede darse esa situación actualmente en Alianza Lima, y precisamente con Mario Salas. Los Blanquiazules no han comenzado bien la temporada post coronavirus, con una dinámica marcada por la irregularidad. Una situación que deja al técnico en el alambre y a expensas de los próximos resultados y que se refleja desde la última vez que el equipo ganó un partido.

Fue a principios de mes cuando Alianza ganó su último partido liguero contra Deportivo Llacuabamba por 2-0 como local. A partir de ahí, solo suma un empate y cuatro derrotas en los últimos cinco encuentros, y desde el regreso del fútbol ha conseguido solo tres triunfos. A eso, hay que añadir su actuación en la Libertadores, con un empate y cinco derrotas en un grupo complicado contra River Plate, Nacional y Estudiantes de Mérida, con el que perdió la chance de clasificar para la Sudamericana.

Finalizó duodécimo en el Apertura y ahora se sitúa solamente tres puntos por encima de los puestos de descenso, un escenario casi 'dramático' para un club de su envergadura y con un plantel más que variado que deja al técnico en entredicho y un margen más limitado para tratar de revertir la situación ante las críticas recibidas por el momento que atraviesa el club.

El encuentro ante Deportivo Municipal se antoja casi como una final para Mario Salas, que en el peor de los escenarios podría ser destituido después de llegar al equipo en abril.