Alessandro de Souza: "Defenderé los colores de la mejor manera"

El Perú se encuentra sumamente expectante por lo que será el bicentenario de la independencia. En el otro lado del mundo, con catorce horas de diferencia, en esa fecha iniciará la participación de Alessandro de Souza Ferreira en la disciplina de tiro, modalidad fosa olímpica, en Tokio 2020.

Coincidir con las Fiestas Patrias, es un verdadero plus para el tirador nacional. "Es una motivación adicional para poder dejarlo todo. La delegación está muy optimista. Defenderé los colores de la mejor manera", reveló en diálogo con AS.

En las espaldas de De Souza existe el peso descomunal de la historia del tiro, disciplina que le ha dado al Perú tres medallas olímpicas: una de oro con Edwin Vásquez, en Londres 1948; y dos de plata con Francisco Boza, en Los Ángeles 1984 y Juan Giha, en Barcelona 1992. En Tokio 2020, la presea olímpica está en el horizonte. "El gran sueño es la medalla, pero para llegar a eso hay que romper plato a plato. Luego se puede pensar en acceder a la final. Estoy enfocado, ahora, en hacer mi trabajo y en disfrutar esta competencia", reconoció.

Amor a primera vista

Entrando a la adolescencia, Alessandro descubrió que su gran pasión radicaba en las armas gracias al ejemplo de un familiar muy apreciado. "Mi abuelo, por parte de mamá, era aficionado a las armas. Él emigró de Italia a Perú en plena Segunda Guerra Mundial. A los 12 años me llevó al campo de tiro y desde esa vez fue como un amor a primera vista. Quedé enganchado con este deporte", admitió.

Conexión blanquiazul

Nuestra actual carta en fosa olímpica tiene otra pasión igual o superior que el tiro: Alianza Lima. El club victoriano es parte de su círculo íntimo. Es más, sus familiares tienen un vínculo especial con la entidad íntima. "El fútbol me apasiona verlo y jugarlo. Mi tío tatarabuelo fue Alfonso de Souza Ferreira, uno de los presidentes del club. Junto a Walter Lavalleja fundaron Matute. Desde pequeño estoy ligado a la blanquiazul. Soy muy hincha", expresó.