Comizzo, en la cuerda floja

El "quédate tranquilo que no voy a renunciar" que un Ángel Comizzo desafiante pronunció luego de la goleada sufrida en casa de Independiente del Valle no ha dejado tranquilo a nadie. De hecho, la inmensa mayoría de hinchas de Universitario -por no decir todos- hubieran celebrado casi como un triunfo la renuncia, esa misma noche, del técnico crema, que, con su estilo confrontacional y su escasez de ideas tácticas, ha llevado a su equipo a firmar un arranque de año de pesadilla.

Lo cierto es que, pase lo que pase, Comizzo no renunciará. Lo ha dicho una y otra vez, de manera que tendrá que ser la directiva -de momento, poco proclive a desprenderse del técnico por el que apostó el año pasado- la que se deshaga de él llegado el momento. Y el momento parece estar llegando.

Cienciano, ¿punto de quiebre?

Universitario ha disputado ocho partidos desde que empezó el año: perdió cinco, ganó dos y empató uno, un saldo nefasto para un club cuya intención era la de pelear por el campeonato peruano y hacer una buena Copa Libertadores. Si bien tuvo la mala suerte de caer en un grupo ridículamente difícil en el certamen continental, lo que no tiene justificación es lo mal que juega el equipo en todos los frentes.

El brote de Covid-19 que se produjo en el plantel puede explicar alguna mala actuación, pero incluso cuando el equipo estuvo sano, nunca quedó claro cuál era la idea de juego, ni mostró ningún automatismo. Comizzo llegó en junio del año pasado a Ate, de manera que tiene ya casi un año a cargo de un equipo al que no ha logrado transmitir demasiado. Ese es el principal reclamo de la hinchada, que ha visto cómo, desde la Fase 2 del torneo anterior, su club ha ido cayendo en picada.

Mañana la 'U' enfrentará a un Cienciano que viene entonado: el equipo cusqueño es el líder de Grupo A, está invicto y juega bien. Si es que el cuadro crema quiere seguir soñando con llegar a la final de la Fase 1, es obligatorio que gane todo lo que le queda en la Liga 1. De caer ante los de Marcelo Grioni, Comizzo podría empezar a tambalear en su puesto.